Gonzalo Berzosa Zaballos. Director de la Escuela de Bienestar. Director del Instituto de Formación en Gerontología y Servicios Sociales (INGESS). Secretario de la Fundación Pilares para la autonomía personal, Madrid
Para contactar:
Gonzalo Berzosa Zaballos: gonzalo@intersocial.es
La Escuela de Bienestar es una iniciativa de FUNDACIÓN MAPFRE, que ofrece información y formación para facilitar pautas de intervención a quienes acompañan el desarrollo personal y social de personas con discapacidad. Su finalidad es apoyar el papel que desempeñan hoy las familias para garantizar el bienestar y la calidad de vida de estas personas (figura 1). Se desarrolla a través de tres objetivos específicos.
- Informar y orientar sobre los cambios personales, familiares y sociales que acompañan la trayectoria vital de la persona con discapacidad.
- Asesorar y capacitar a las familias para que den respuestas a las demandas que estas personas presentan en sus etapas de desarrollo y maduración.
- Motivar y estimular para que las familias desempeñen un papel activo en el proceso de inclusión y presencia social de estas personas.
La Escuela se dirige a las familias porque son la institución que va a acompañar a la persona con discapacidad durante toda su trayectoria vital, teniendo en cuenta que van a vivir muchos años, es decir, van a envejecer. Esta conquista social fruto de los avances en la salud, en la educación, en el empleo, en el ocio compartido y sobre todo en la inclusión social, conlleva a su vez, cambios significativos en su desarrollo personal y también en las formas de vida familiar y en los recursos sociales.
Entre los cambios más importantes hay que destacar que «la discapacidad no significa una minoría de edad permanente». Por eso las familias y la sociedad se encuentran con nuevos modelos de ser persona con discapacidad, que, entre otros aspectos:
- Reivindican ámbitos de autonomía personal y vida independiente.
- Demandan participar en el mundo laboral.
- Conocen y manejan las tecnologías y desean estar al día.
- Estudian y desean seguir aprendiendo toda la vida.
- Quieren acceder a la cultura y disfrutar de la sociedad del ocio.
- Viven la inclusión social porque son ciudadanos con derechos y deberes.
- Antes solo tenían pasado y presente, pero hoy tienen futuro porque van a vivir muchos años.
Estos cambios requieren disponer de recursos personales y sociales porque algunos, por acelerados e inesperados, pueden afectar a las propias personas con discapacidad y a sus familias al repercutir en el modelo familiar tradicional en el que viven.
Desde esta perspectiva es fácil entender que la aceptación y la incorporación de estos cambios no es tarea fácil para muchas familias, bien sea porque viven en contextos que todavía no han incorporado los modelos de inclusión social, bien porque carecen de recursos institucionales para acoger a sus hijos e hijas, o bien porque las mismas familias adolecen de formación y de habilidades para acompañar los cambios en su desarrollo.
Por todo esto, la Escuela de Bienestar es una oportunidad para reflexionar sobre estos cambios, promoviendo actitudes positivas de adaptación a ellos, a fin de que las personas con discapacidad sigan siendo activas y no pasivas, agentes y no pacientes, protagonistas y no espectadoras de su vida. En definitiva, para que las capacidades adquiridas en los ámbitos de autonomía personal y de vida independiente social se mantengan durante toda su trayectoria vital.
Somos conscientes de que cambiar no es fácil porque todo cambio genera resistencias, pero también sabemos que las resistencias se superan con información y comunicación. Por eso la Escuela de Bienestar ofrece a las familias una plataforma de reflexión, asesoramientos y comunicación en cuatro ámbitos que engloban la vida de las personas con discapacidad:
- La salud integral.
- La convivencia familiar y social.
- Las redes de relación y los vínculos.
- La inclusión en toda la trayectoria vital: escuela, ocio, trabajo, formación, envejecimiento activo.
Para conseguirlo, la Escuela de Bienestar ofrece una serie de programas que dan respuesta a algunas inquietudes, necesidades y orientaciones que suelen tener las familias que atienden a personas con discapacidad y que se pueden sintetizar en cuatro grandes apartados:
- Cómo promover y estimular su desarrollo personal educando en hábitos saludables, físicos, psíquicos y sociales.
- Cómo fomentar conductas independientes y adecuadas para que hagan las cosas por ellos mismos y puedan conseguir desarrollar sus capacidades.
- Cómo generar redes de relación estables con personas afines para compartir actividades y ocio, y de esta manera mantener vínculos y amistades.
- Cómo planificar el futuro para que las capacidades conseguidas en la infancia y juventud se mantengan como adultos y en el proceso de envejecimiento.
Los contenidos se ofrecen a través de una plataforma de Internet con una metodología activa y participativa que da respuesta a las demandas con las que se encuentran las familias en su vida cotidiana, enfrentándose a ellas como retos y no como amenazas (tabla 1). Porque estamos convencidos de que «los niveles de autonomía de las personas con discapacidad intelectual son directamente proporcionales a los apoyos que se les presta, e inversamente proporcionales a la sobreprotección con las que se les trate».
La Escuela de Bienestar se encuentra disponible en: http://discapacidad.fundacionmapfre.org/escuelabienestar/es/